
La igualdad retributiva es una de las principales preocupaciones de la política de igualdad de la Unión Europea y de la española, tal y como se parecía en la extensa legislación al respecto. Sin embargo, a pesar de todos los avances producidos, la brecha salarial entre mujeres y hombres persiste. Y todo parece indicar que los factores de discriminación indirecta son su causa principal, en particular la incorrecta valoración de los puestos de trabajo.