Tranquilas. Las niñas son más tranquilas. Sin duda. Las niñas son más tranquilas que los niños, que siempre están jugando a lo bestia y a hacer el bruto.
No se están quietos los niños.
Se suben por los sofás en las casas o corren alrededor de la mesa; en la calle se mueven como locos, gritan, rugen, pelean y patean a veces; giran por los aires y les encanta probar su fuerza con los mayores.
Las niñas no.
Tranquilas
Las niñas son más tranquilas.
Las niñas pueden estar dos horas sentadas pintando tranquilitas mientras las mamás toman el té con pastas o charlan de sus cosas con sus amigas. En el parque las niñas se sientan en el banco o pasean.
Las niñas no son tan agresivas, no miden su fuerza constantemente, no corren por los pasillos ni trepan los árboles ni se pegan en el cole ni juegan a lo cafre. Las niñas no piden muñecos combatientes a los Reyes Magos, piden a Kitty y disfraces de princesas rosas.
Las niñas son más tranquilas, esto son solo algunos ejemplos pero todos los hechos lo muestran.
¿Acaso dudas? Todo el mundo lo dice, incluso tengo ejemplos muy cercanos.
Es un hecho indiscutible y comprobable.
[…] en el post anterior una realidad muy manida en nuestro imaginario […]