El pasado 17 de noviembre estuve en un acto en el Parlamento Europeo sobre los permisos de maternidad y paternidad iguales, intransferibles y 100% remunerados. El acto estaba organizado por Podemos (integrado en el Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria europea) y la Plataforma Internacional por los permisos de paternidad iguales, intransferibles y 100% remunerados (PLENT) de la que es parte la PPiiNA española.
Me di cuenta de que en una propuesta que yo siempre he visto tan clara existen varias líneas de interrogantes que no parecen estar suficientemente habladas y consensuadas.
Aquí me gustaría reflexionar sobre una que me parece de fundamental importancia para cohesionar una postura feminista en torno este tema: ¿cómo justificar ante las feministas de una tendencia más biologicista que la equiparación de permisos entre padres y madres debe ser priorizada antes que la ampliación del permiso de maternidad? Sobre esta cuestión intercambiamos interesantes ideas durante el evento, y aquí me gustaría asentar algunas de ellas.
Muchas de las compañeras que quieren ejercer una maternidad con apego sitúan como una reivindicación política de primer orden la ampliación del permiso de maternidad de 16 semanas que actualmente tenemos en España. Estas madres que quieren pasar más tiempo con sus hijas e hijos y priorizan temporalmente ese tiempo de cuidados frente a otros aspectos, como pueden ser la incorporación laboral o el desarrollo de otros proyectos propios. Generalmente, su argumentario se fundamenta en un vínculo materno-filial que es único y determinante para el desarrollo y bienestar de la hija y de la madre.
Por ello, la prioridad de estas mujeres, muchas de ellas feministas, no es atajar la reproducción de los roles de género que definen (y someten) a las madres como cuidadoras principales sino ampliar su tiempo de crianza a tiempo completo. En esta exclusividad del vínculo, en una pareja heterosexual se quedaría fuera el padre, que pasaría a un segundo plano en los cuidados.
Le he(mos) dado muchas vueltas a las posibles argumentaciones que existen para convencer a estas mujeres y compañeras (generalmente heterosexuales) de por qué debemos priorizar ante todo la equiparación de derechos parentales y hacerlos intransferibles entre mujeres y hombres. Casi nunca nos sirven. Básicamente, estas razones serían:
- Porque es la única manera de que las mujeres no seamos discriminadas en el mercado laboral por la cuestión maternal (tanto en la (re)incorporación como en el ascenso),
- Porque es el único modo de poder compatibilizar los diversos proyectos vitales que tenemos,
- Porque es una antídoto contra la llamada depresión postparto, que no es más que una expresión somática que suma el puro agotamiento con la caída del mito de la maternidad,
- Porque es una forma de re-educar a nuestrxs hijxs y reeducarnos en la corresponsabilidad de cuidados entre mujeres y hombres,
- Porque es una vía para asegurar nuestra autonomía económica presente y futura,
- …
… a mí todas estas razones me bastan y me sobran pero sé que no son suficientes para estas otras mujeres o madres feministas. La única razón para la que no he encontrado una posible contrapropuesta o pega, la única que creo que podría cerrar esta discusión, creo que es la siguiente: porque ellos (los padres) también tienen derecho a cuidar a sus hijxs a tiempo completo.
Y es entonces cuando me encuentro con una posibilidad que me lleva inevitablemente a plantear la siguiente pregunta: ¿es tarea del feminismo defender el derecho a cuidar de los padres?
Me resulta como mínimo paradójico que sea en la defensa de un derecho masculino en donde resida la clave feminista para cohesionar una reivindicación colectiva en torno a este tema. Pero me temo que así es.
Cuidar a nuestrxs hijxs no es un ejercicio sobre el que las mujeres o las madres debamos tener potestad absoluta. Cuidar a nuestrxs hijxs es algo que aprendemos, y los padres -la experiencia me avala- pueden cuidar tan bien como las madres. Y tienen el mismo derecho que nosotras a disfrutarlo, intentarlo, pelearlo y llorarlo (y preocúpense de hacerlo también!).
Y así es, pues, como me encuentro: defendiendo la equiparación de permisos parentales remunerados y su no cesión desde la única isla que tiene la fuerza suficiente para convencer a las incrédulas. Porque en ésta, como otras cuestiones, necesitamos estar unidas y unidos para lograrlo.
NOTA: dadas las imprevisibles oportunidades de la vida, este post está inevitablemente unido al de Leonas. Como siempre, vuestras opiniones son bienvenidas pero sugiero encarecidamente que, si os interesa verdaderamente el tema, os deis una vuelta por mi página de FB para haceros una idea global del revuelo organizado y de las diferentes posturas y actitudes frente al diálogo. También tenéis que tener paciencia y tener a mano, o bien una tila o bien un gintonic.
[…] Artículo original publicado en su blog […]
Me duele bastante la definición que se hace en el artículo de depresión postparto. Ya que llevo casi un año investigando sobre el tema y reducirlo a esas palabras me parece, con todos mis respetos, un error.
Hola mamafenix, gracias por comentar. Creo que tienes toda la razón en que me he referido a la depresión postparto de una forma poco respetuosa y, sobre todo, infundamentada. Otras mujeres me han recriminado en la misma dirección. La semana que viene quiero escribir unas breves reflexiones a raíz de las múltiples alarmas (algunas insultantes) que se han producido por mi anterior post. Entre ellas, reconozco mi irresponsabilidad en el punto que tú mencionas. Saludos.
Gracias por tu respuesta. Un beso.
[…] post ¿Es feminista defender el derecho a cuidar de los padres? es una opinión propia, mía. Yo no represento a Podemos y no tengo responsabilidad pública […]
Por supuesto que los padres tienen derecho a cuidar a tiempo completo. ¡Faltaría más! Y a darles el pecho cuando lo necesiten.
Hola Aldo, jaja, me gusta el guiño del pecho 🙂 Es interesante ver la inmensidad de posturas que permite este debate. Si en algún momento te ves con ganas y tiempo échale un ojo a mi página de FB y lo comprobarás.
Tu comentario me da pie a abrir la preguntaque más me inquietaba a mi con este post: ¿pero quién debe defender ese derecho, las mujeres (feministas) o los hombres? ¿qué movimiento debe articular la defensa del derecho a cuidar de los padres?
Gracias por pasarte por aquí y comentar. Un abrazo
Hola Ana!
Me parece muy interesante lo que apuntas. También creo como feminista y como madre (heterosexual) que la figura del padre es esencial.
Ahora bien, aquí una duda y/o que creo extrapolable a otros ámbitos ¿por qué no son los hombres quienes abanderen esta lucha?
Un abrazo!
maría
Hola María, cuánto me alegra que estés por aquí, admiro mucho tu trabajo!
Tenemos una montada que ni te lo puedes imaginar… si te interesa otear el panorama del debate, pásate por mi página de FB, ¡con paciencia!
Respecto a lo que planteas… sí, sin duda creo que son los hombres quienes deben liderar esta reclama. Es más, ya están tardando.
Lo planteaba de esa manera porque soy una loca de la coherencia y me interesa indagar en los fundamentos del feminismo. Pensaba, y visto lo visto se ha confirmado, que las argumentaciones para defender la ampliación del derecho de paternidad eran obvias para casi todo el mundo pero por diversas razones imaginaba que entre ciertas mujeres esas razones eran insuficientes. Por eso quise aterrizar en el derecho de los padres, tonta de mí de imaginar que en nuestro universo heterosexual las madres iban a querer que sus queridas parejas amorosísimas e hipercomprometidas y masculinotransformadas tuvieran también un permiso de paternidad más amplio y blindado por la ley.
Y entonces me preguntaba si el feminismo, por coherencia interna, podía defender a nuestros súper churris.
Yo creo que el feminismo debe defender la libertad de elección de las mujeres, principalmente. Pero también creo que tenemos que aliarnos mucho más con otros movimientos.
En fin, todo un temón.
Un abrazo grande
He contestado el ultimo post que has escrito sobre el tema porque aún no había leído este y la verdad, ni lo he acabado de leer.
Que lo que nos discrimina del mercado laboral es el hecho de tener una baja maternal? Enserio? En algunas empresas de algunos países, se valora el hecho de ser madre por tener una capacidad de resolución y una efectividad que no tiene una mujer sin hijos, por poner un ejemplo. Creo que el hecho de cogerse la baja en sí, puede hacer que te discriminen. Conozco el caso de un hombre en España que se cogio la baja y su empresa de lo tomó fatal. Quizá es porque en España valoramos más el terreno laboral/profesional que familiar y no está bien visto cogerse una baja de maternidad ni pedir reducción de jornada para conciliar vida laboral y familiar.
Depresión post parto. Parece ser que hay muchas que ya se han hecho cargo de tumbar ese punto. Una mujer necesita una tribu, un apoyo, un hombre con unas condiciones laborales que le permitan acabar a una hora razonable para poder pasar el mayor tiempo posible con la mama que se está adaptando a su nueva vida , a la nueva identidad que nace cada vez que tenemos un bebé.
Reeducar. Puede ser una forma. Pero ya he dicho que estoy en contra de la baja impuesta. Sino que se debería dar la opción. Aquellos que se cojan la baja, seguro que no necesitaban reeducacion sino que seguro que ya son tan responsables con el cuidado del bebé como la madre. Los que no quieren la baja…enserio crees que el hecho de obligarles a cogerse la baja los reeducara? O será más bien «le dejo el niño a la abuela y yo hago mis cosas»?
Sofía, por n repetirme tantas veces, cuando tengas tiempo y te apetezca pásate por el resto de respuestas de estos dos posts o, si lo prefieres, por mi página de FB.. pero con cuiadado que te puedes volver loca!
un abrazo y que disfrutes mucho, mucho, y te dejen, tu maternidad. Enhorabuena 🙂
Gracias!! Ya lo intentare! A pesar de no estar de acuerdo con todo, me ha encantado leerte.
Gracias por las felicitaciones. Mi peque ya tiene 2años. Y si, disfrute de 1año de baja por maternidad y casi otro de excedencia y espero hacer lo mismo con el que está en camino. Bueno, voy a seguir leyendo los otros posts! 🙂
Un beso, Sofía y ¡a portodas! Os deseo mucha felicidad.
Hola guapa!!!
Ya he oteado el horizonte, ya. Y flipando un rato….
Creo que como feministas debemos defender el derecho de nuestros hombres a tener una baja paternal garantizada por la ley. Lo que no entiendo es cómo se ve este tema como una ofensa a la MADRE.
Respeto todos los planteamientos vitales y opciones de madre, aunque no las comparta. Pero esa biologización de la maternidad me chirría un poco. Como mamífera he tenido un vínculo brutal y sé que único con mis hijxs. Los he parido, los he amamantado (algo que no me ha supuesto ninguna satisfacción especial ni cósmica) algo que su padre no ha podido hacer. Pero de ahí a erigirme como única regerencia cuidadora pues va un abismo…
Soy una madre que vive en el capitalismo. Oye, tengo la mala costumbre de tener que pagar las facturas todos los meses, y eso me hace tener que trabajar. Además, adoro mi trabajo aunque sea tan precario y he querido formarme, publicar, escribir….Una pija-precaria-con-ambición
Y lo he pasado fatal intentando combinar todas las facetas sin renunciar a ninguna.
Sí, es un temazo en el que se echa en falta un poco más de sosiego…
Beso!
Gracias María, siempre me has encantado por tu sarcasmo y tu bravura. Comparto todo lo que planteas. Un besazo
[…] a Vanesa, autora del blog Una madre como tú que, en respuesta a mi primer post de esta discusión (¿Es feminista defender el derecho a cuidar de los padres?), que se publicó en el muro de FB de Podemos Feminismos, escribió este otro: Curar la depresión […]
[…] a Vanesa, autora del blog Una madre como tú que, en respuesta a mi primer post de esta discusión (¿Es feminista defender el derecho a cuidar de los padres?), que se publicó en el muro de FB de Podemos Feminismos, escribió este otro: Curar la depresión […]