Aunque algunas lo crean el 8 de marzo no es una celebración, es una reivindicación. Avanzamos, claro, no lo niego. Pero seguimos arrastrando machismo, misoginia, androcentrismo, imposiciones, violencias, minusvalor, invisibilidad.
Cada una de nosotras orienta su lucha hacia donde más le palpita. Otras tratan de ser más globales. Otras no se movilizan. Otras ni si quiera se han dado cuenta de lo feministas que son.
Hay feministas que huyen del cuerpo, yo en cambio busco encontrarme con él. Hay feministas que lo reinventan.
Hay feministas que niegan el feminismo institucional, pero yo lo entiendo como un instrumento y una posibilidad.
Hay feministas que siguen sacando feministómetros, sospechando de la otra, asumiendo sin conciencia la distancia y la lógica patriarcal que pervive para separarnos. Yo las veo y no lo entiendo.
Ahora estoy trabajando en la autoconciencia, en el empoderamiento colectivo, en la subjetividad y la palabra. Paralelamente, voy centrando mis aportes profesionales en las herramientas para incorpororar el enfoque de género en los proyectosde intervención, en las políticas públicas y en la vida cotidiana.
Una línea muy colectiva, situada en el cuerpo y en la voz, y otra línea más institucional, desarrollada en el conocimiento aplicado.
El 8 de marzo yo voy contra unas pocas cosas pero sobre todo voy a por unas cuantas cosas.
¿Y tú?
Los Pekos estuvimos en la «mani» con Europa Laika. Estamos muy satisfechos de ser Feministas a tope y luchar CONTRA los fascistas que asesinan a sus compañeras. Salud y Repúblika Laika. 17 Pekos.
¡Qué alegría teneros por aquí, Pekos! 🙂
Ya sabía yo que sois muy combativ@s y que no os perdéis una. ¡Seguimos adelante! Muchísimos besos para vosotr@s.